Siempre me he preguntado de dónde sacan los náufragos en una isla desierta una botella para lanzar un mensaje de socorro al mar. En cualquier caso, esta botella mensajera es un clásico de las novelas y las películas de aventuras. Pero no solo es ficción: al parecer, los guardiamarinas del buque escuela Juan Sebastián Elcano, lanzan al mar cada mediodía una botella con la posición del buque y un breve mensaje. Por otra parte, encontraréis en internet muchas noticias sobre botellas viajeras; algunas han pasado años en el mar y han recorrido miles de millas.
Pues tras esta amena presentación, la tarea: como permanecer confinado en casa es algo parecido a estar en una isla desierta -más o menos-, os propongo escribir un mensaje para enviarlo en una botella. Ojo: la botella es imaginaria, ¡IMAGINARIA! No tiene por qué ser muy extenso; el que quiera puede hacer dibujos o mapas, y, como es un mensaje personal, tiene libertad para comunicar los sentimientos que quiera. Lo que no vale es escribir una sola palabra -"¡Socorro!"- o poner la lista de la compra.
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