jueves, 2 de abril de 2015

Reencuentro


El narrador de esta historia, Hans Schwarz, evoca su amistad con Konradin von Hohenfels. Una amistad surgida entre dos jóvenes tan parecidos como diferentes. Los dos tienen la misma edad, 16 años, comparten las mismas aficiones por el arte y la poesía, y los dos están solos. A Konradin lo aísla su alta condición social: es heredero de una histórica y poderosa familia de la nobleza suaba. Hans es hijo de padres judíos, que asustados por el odio racista del partido nazi envían a su hijo a Norteamérica. Pero ya antes de la partida de Hans, su amistad con Konradin ha sufrido un golpe mortal.
Fred Uhlman (1901-1985) recuerda mucho de su propia juventud y la nostalgia por su ciudad natal, Stuttgart, en esta pequeña obra maestra. Posteriormente publicó Un alma valerosa, en la que el narrador es Konradin von Hohenfels. Su lectura es imprescindible para completar esta historia que, en realidad, es una novela única a dos voces.